El coraje, la pasión, la locura y la algarabía son algunos sentimientos que se reflejan en la carrera automovilística más importante del país, cuando los mejores competidores del país aceleren a fondo los días 5, 6 y 7 de noviembre buscando alcanzar la primera ubicación de este emblemático evento.
Hoy en día, el Circuito Oscar Crespo es un espectáculo deportivo a nivel nacional e internacional que ofrece tramos de velocidad y habilidad conductiva, con la particularidad de ser el único circuito del mundo que atraviesa sus calles patrimoniales del casco histórico de la ciudad capital de Bolivia.
Las máquinas irrumpen a gran velocidad por la plaza 25 de Mayo y calle Calvo que posibilita a los aficionados ubicarse en los tradicionales balcones chuquisaqueños para gozar del espectáculo y aplaudir la destreza conductiva de más de un centenar de pilotos que desafían a la historia.
A 50 años de la tradicional competencia, también destacan los sectores de Qhora Qhora, Ckochis y Totacoa que se convierte en los sectores más exigentes para pilotos y navegantes que desafían un camino serpenteante y trabado al ser de tierra.
La belleza tradicional chuquisaqueña y un cálido clima cobija a cada participante y seduce a varios espectadores, dejando los últimos kilómetros para el empuje al máximo. El sector de la Glorieta, El Tejar, la Prosperina y las calles Bustillos y Argentina terminan convirtiéndose en una cinta asfáltica de pura adrenalina buscando parar el crono en el menor tiempo posible.
Recordemos que la pasión por las carreras automovilísticas en la ciudad de Sucre incian allá por el año 1970, cuando un hombre llamado Oscar Crepo Maurice, apodado como «El Caballero de las Rutas», sin pensarlo, dejo un legado difícil de borrar para todo amante de su tierra y el deporte motor.
Enmarcamos el Plan Municipal de Gobierno y el Pilar Estratégico «Educación y Deporte Sin Exclusión».