Las condiciones insalubres, recepción y mantenimiento inadecuado de productos, utensilios y ambientes contaminados con heces fecales de mascotas, entre otras faltas graves, fueron las causas para proceder con la clausura inmediata de una pastelería que operaba sin licencia de funcionamiento, al interior de un domicilio particular situado en la calle Ostria Reyes, próximo a la Terminal de Buses.
En primera instancia y tal como exige la normativa, la Intendencia Municipal acudió a la vivienda denunciada por funcionamiento clandestino, y pese a que los propietarios se opusieron a la inspección, los funcionarios municipales intervinieron la pastelería donde evidenciaron las precarias condiciones de elaboración de los productos.
Asimismo, encontraron harina sin registro sanitario, enseres en mal estado y un entorno contaminado como consecuencia de la tenencia irresponsable de mascotas.
Por esas faltas graves, los propietarios fueron sancionados y la actividad clausurada, hasta que las instancias competentes normen su legal y correcto funcionamiento.