La Municipalidad de Sucre, la tarde del viernes 10 de abril, hizo llegar decenas de barriles con 22 mil litros del compuesto químico, “Hipoclorito de Sodio (NaOCl)”, para continuar el protocolo de fumigación y desinfección de calles, como medida de prevención contra el contagio de coronavirus.
La adquisición de esta cantidad considerable de “Hipoclorito de Sodio”, se realizó con recursos municipales, en el marco del cumplimiento de las tareas de prevención y seguridad, contra el COVID-19 y los posibles contagios en los cinco distritos del Municipio de Sucre.
Esta es un actividad que se ejecuta en la ciudad Capital, desde hace 14 días y con los carros cisterna, existentes en la municipalidad. Es un proceso que consiste en fumigar con el líquido desinfectante en todos los espacios, equipamientos y lugares concurridos con más frecuencia por los vecinos de distintas zonas de la ciudad.
“Es una lucha contra el COVID-19 y la fumigación consiste en esterilizar de forma constante todos los espacios, calles, parques, edificios y mercados”, sostuvo el Secretario de Infraestructura Pública, Emil Arias, a tiempo de recomendar a la población, que permanezcan dentro de sus hogares, cierren puertas y ventanas, mientras se realiza la desinfección en su zona.
La adquisición de los 22 mil litros de “Hipoclorito de Sodio”, reforzará el fumigado de las zonas más populares de la ciudad. Este químico es un compuesto oxidante de rápida acción, cuya fórmula mezclada con agua, posibilita la desinfección de los espacios públicos, como un medio que evita la dispersión del coronavirus.
Son varias jornadas de fumigado de calles y cubre un número superior a 500 cuadras en cumplimiento del plan propuesto por el Ejecutivo Municipal de Sucre. Son tres camiones cisternas que trabajan por jornada; cada camión realiza dos turnos de viaje por día. En 14 días se calcula un aproximado de 390 kilómetros recorridos hasta la fecha.
Por jornada son 60 trabajadores municipales que ejecutan el trabajo de fumigación de calles, entre chóferes, técnicos y trabajadores manuales, en turnos laborales que dejan las calles fumigadas en los cinco distritos municipales. Todos son dependientes de la Secretaría de Infraestructura Pública.